sábado, 4 de junio de 2011

Me gustan las merendolas


Para comer un chocolate con churros, un suizo (chocolate con nata), y las mejores ensaimadas de Barcelona hay que ir a la calle Petritxol. Pero esta estrecha calle es mucho más que eso. A lo largo de sus 130 metros confluyen arte, repostería y pequeños comercios. Vale la pena pasear por este rincón lleno de historia y dejarse llevar por el aroma dulce que le otorgan las múltiples granjas y tiendas que alberga. 


Una de las más mejores y más conocidas granjas es “La Pallaresa” (C/ Petritxol, 11), inaugurada en 1947 y que antiguamente había sido una vaquería, tal y como recuerdan los cuadros que decoran el local. Además de ofrecer chocolate a la taza casero, deliciosa nata casera (hacía años que no probaba una nata tan rica) y los productos típicos de estos establecimientos, éste es uno de los pocos locales de Barcelona donde todavía se puede degustar el auténtico “menjar blanc”, un postre tradicional catalán, una crema de almendras con toque de canela y limón, auténtica delicia para los más golosos.

Normalmente en inverno es bastante difícil coger mesa, sus largas colas en la entrada son una característica de este lugar, pero realmente es una delicia cuando hace frío, refugiarte en este sitio tan auténtico… te devuelve a la Barcelona de los años 80 (excepto por la factura, claro… :-))



No hay comentarios:

Publicar un comentario